La primera parada fue en Zapala y el objetivo fue descubrir la mejor receta con piñones, el fruto de la Araucaria. “Esta aventura gastronómica arrancó allá por la Quiaca, en Jujuy.
Bohemio errante (la morfina y el alcohol hicieron estragos en su cuerpo) "no perdió jamás el gusto por los versos, como si conservara algo de la divina virtud de la poesía en medio del infortunio".